Comprar una propiedad es una decisión que no solo necesita tiempo para conocer las ofertas del mercado inmobiliario, de igual manera debemos considerar varios aspectos que nos ayudarán a elegir aquella que más de adapte no solo a nuestro presupuesto, también a nuestras necesidades y estilo de vida.
Encontrar la casa perfecta no es una tarea fácil, se trata de una decisión importante, ya que para la mayoría de las personas adquirir un inmueble es una oportunidad que se presentará pocas veces en la vida debido a diversos factores, principalmente el económico, pero quienes logran hacerlo, saben que se trata de una inversión monetaria importante, que tiene que planificarse con detenimiento, ya que no debemos tomar una decisión basándonos solo en referencias, porque se trate de una propiedad que “luce bonita” en su exterior (esto no significa que no haya algún problemita en su interior que más delante tengamos que resolver) o tal vez porque su precio representa “una excelente oportunidad”, hay que investigar muy bien las ofertas que estén disponibles en el mercado, ya que cada proyecto inmobiliario es único, con características que los hacen auténticos y atractivos para sus compradores.
Para tomar la decisión más correcta al momento de elegir un inmueble, ya sea un casa o departamento, debemos buscar aquel que se adapte a nuestras necesidades y estilo de vida, también hay que considerar si queremos una vivienda para habitarla en familia o si viviremos solos, su tamaño, número de habitaciones y baños, ubicación y hasta precio. No olvidemos que aquellos aspectos que para nosotros pueden ser muy importantes, para otros resultarán innecesarios.
Si queremos comprar una propiedad nueva, debemos buscar una constructora con experiencia y buena reputación, que pueda proporcionarnos información como razón social, licencias, permisos de construcción, entre otros datos que respaldarán nuestra inversión. Si se trata de comprar un inmueble usado o de arrendarlo, debemos buscar inmobiliarias de prestigio, con experiencia y trayectoria en el mercado para asesorarnos.
También debemos analizar el mercado inmobiliario, donde actualmente podemos encontrar diversas opciones de vivienda en distintos puntos del país para elegir muy bien la zona, ya que no es recomendable invertir tiempo en revisar propiedades que se encuentren en aquellos lugares que no nos gusten o que estén fuera de nuestro presupuesto. Mientras más informados estemos, tomaremos una mejor decisión.
Antes de iniciar nuestra búsqueda y sobre todo, antes de elegir una propiedad, hay que revisar una serie de factores que son importantes, y aunque estos en ocasiones llegan a depender del presupuesto de cada persona, también deben satisfacer nuestras expectativas y preferencias:
Para tomar una decisión acerca de cuál de las dos opciones es la mejor, hay que considerar las ventajas y desventajas de cada una, por ejemplo: en una casa generalmente hay más espacio, si es de dos plantas, si tiene jardín y patio puedes tener mascotas, puedes ampliar o modificar algunas áreas, y no compartes con vecinos hacia arriba o debajo de tu casa.
En un departamento los espacios son reducidos, los gastos de mantenimiento son más bajos, su precio suele ser más bajo, aunque dependiendo de su ubicación pueden llegar incluso a ser más caros, y si eliges los pisos más altos, será menor el ruido, ya que si se encuentra abajo, el ruido aumentará por su cercanía con la calle. Aún así, un departamento es una excelente inversión.
Debemos tomar en cuenta todas las consideraciones, para disfrutar de la mejor calidad de vida. En HU Lifestyle contamos con diferentes desarrollos los cuales, además de contar con seguridad y excelentes amenidades, existe una variedad de modelos de casas y departamentos, que se adecúan a tus necesidades.
Para elegir el tamaño y distribución ideal de nuestra casa o departamento, hay que pensar en nuestra comodidad y planes a futuro, es decir, si siempre viviremos solos, si tendremos una mascota (porque ellas también necesitan su espacio) o hasta si formaremos una familia.
Hay que considerar el número de habitaciones, baños y el tamaño de los espacios compartidos como la cocina, el comedor, la sala, el cuarto de lavado, y si queremos un jardín, un patio o un balcón y hasta los cajones de estacionamiento. Y en caso de querer expandir algún espacio a futuro, debemos saber si habrá oportunidad de llevarlo a cabo. En nuestro blog también te dejamos un artículo de cómo sacarle provecho a un smart home.
Debido a que la compra de una casa representa una inversión a largo plazo, hay que definir un presupuesto para realizar el pago de las mensualidades, que no exceda el 30% de nuestros gastos para no desestabilizar nuestras finanzas, ya que también deberemos cubrir gastos adicionales como son escrituración, mantenimiento, servicios, los seguros de la vivienda, impuestos, entre otros.
Si se trata de una propiedad nueva o usada, la opción ideal sería realizar el pago de contado si disponemos del dinero para hacerlo. Pero si tenemos que recurrir a un crédito hipotecario, debemos buscar una hipoteca que nos ofrezca los interés más bajos y que nos permita realizar su pago en cómodos plazos.
También podemos negociar un mejor precio, dependiendo de la forma de pago, una vez que hayamos investigado los costos promedio que se oferten en la zona de nuestra preferencia, dependiendo de las dimensiones y de la edad de la vivienda. Una ventaja es que, una vez que adquirimos una casa o departamento, esta puede darnos rentabilidad si decidimos alquilarla o hasta venderla, lo que nos ayudará a terminar de pagarla.
Sabemos que el costo un inmueble dependerá de su ubicación. Si queremos una zona céntrica el precio puede ser elevado o si viviremos a las afueras de una ciudad, los precios de las casas son más bajos. También debemos tomar en cuenta la distancia y accesibilidad a los servicios como transporte público u oficinas gubernamentales, y a sitios como parques, escuelas, hospitales, centros comerciales o supermercados.
Por eso es recomendable visitar las zonas de nuestro agrado por la mañana y por la tarde-noche para conocer el movimiento del lugar, así como a las personas que habitan y transitan en los alrededores. A largo plazo, estos aspectos influirán para que el inmueble genere plusvalía y supere su valor original.
Además de la comodidad que pueda brindarnos una propiedad, también debemos evaluar la seguridad (pública y/o privada) tanto de la zona que escojamos para vivir como en los alrededores, si las calles cuentan con buena iluminación por las noches, si hay negocios abiertos las 24 horas del día, incluso podemos buscar referencias con los vecinos antes de tomar una decisión.
Este dependerá del tipo de inmueble, si es nuevo o usado porque probablemente requiera de reparaciones o renovaciones para ajustarse a nuestras necesidades. Debemos informarnos si la propiedad ha sido remodelada anteriormente o si ha recibido el mantenimiento adecuado, que esté construida con materiales de calidad, ya que si las instalaciones (de luz, agua, drenaje o gas) llegan a sufrir un desgaste natural, en algún momento debemos invertir en ellas para que sigan funcionando correctamente.
Algunas viviendas nuevas también pueden presentar vicios ocultos, debemos revisar cuidadosamente el estado del mobiliario esencial (cocina y baños), las instalaciones, los acabados (como pisos), las puertas y ventanas para verificar su estado, y si cuenta con cajones de estacionamiento o tendremos que rentar un espacio.
Una casa bien iluminada nos brindará un ahorro energético y calidad de vida. Si posee una bonita vista y luz natural, estos serán valores intangibles que influirán de manera importante en quienes la habitarán. Estos también dependerán de su comportamiento durante cada temporada del año y de su orientación. También debemos analizar si queremos vivir en una zona cálida o fría, porque entonces necesitaremos de aire acondicionado o calefacción.
Los factores principales que los profesionales y expertos del sector inmobiliario evaluarían para tomar la mejor decisión de compra de un inmueble son:
El apoyo de un asesor inmobiliario podrá guiarnos en el proceso de búsqueda de una propiedad para encontrar aquellas opciones que mejor se ajusten a nuestras necesidades. El sector inmobiliario siempre está en constante movimiento, y hay temporadas en las que adquirir una propiedad puede resultar más sencillo gracias a las facilidades que ofrecen las entidades financieras para adquirir un crédito o por los precios competitivos que ofertan las inmobiliarias.
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